Aceite de Oliva y Dieta Mediterránea
Su composición especial lo distingue de los otros aceites vegetales y lo hacen un alimento cuyo consumo previene enfermedades actuales.
Posee un gran porcentaje de ácido oleico que lo hace más resistente al deterioro por temperaturas de cocción y cantidades suficientes de ácidos grasos esenciales (ácido linoléico y linolénico),
Sus otros elementos estrella son numerosas sustancias antioxidantes: tocoferoles, esteroles (sitostero), terpenos,
carotenos, clorofilas y compuestos fenolénicos, componentes que se pierden en gran cantidad durante el proceso de refinado.
Así es como la naturaleza nos ofrece un alimento un alimento de composición magistral con demostradas acciones saludables para nuestro cuerpo. Nos protege la mucosa gástrica y duodenal, previene la formación de piedras de la vesícula biliar y colabora a evitar la osteoporosis al mejorar la absorción intestinal de varios nutrientes como el calcio.
Gracias a su elevada concentración de sitosterol, disminuye los niveles de colesterol total y aumenta el llamado colesterol bueno (HDL) protegiendo nuestro corazón; además ofrece un efecto protector de la hipertensión arterial y
favorece la creación de sustancias antitrombóticas y vasodilatadoras.
Es el mejor y más saludable regalo que nos podemos hacer. Si somos fieles a su consumo diario nuestro organismo y paladar lo sabrá agradecer dándonos una inmejorable calidad de vida.
Por Carmen Bascuñana Minou ( Licenciada en derecho y especialista en dietética y nutrición)